Una amistad que cambia el mundo

¿Alguna vez has dudado en iniciar una conversación con un desconocido? Para muchos, la idea de entablar una conversación con alguien que no conocen puede resultar incómoda, incluso extraña. Sin embargo, en esos momentos de incomodidad se encuentra el potencial de algo transformador, algo que cambie la vida. Después de todo, ¿cómo van a escuchar otros acerca de Cristo si no salimos de nuestra zona de confort y nos relacionamos con ellos?

Cada conversación que tenemos conlleva el potencial de alterar la vida de alguien, incluida la nuestra. Jesús, en su tiempo en la tierra, fue un maestro en transformar encuentros casuales en intercambios espirituales profundos. No rehuía iniciar conversaciones con desconocidos, sin importar su origen. En cambio, se encontraba con las personas donde estaban, se interesaba en sus vidas y gradualmente guiaba el diálogo hacia verdades espirituales más profundas. Uno de los ejemplos más conocidos de este enfoque es su conversación con la mujer samaritana en el pozo (Juan 4:4-26 NVI). Lo que comenzó como una simple solicitud de un trago de agua se convirtió en un intercambio que cambió el curso de su vida y la de quienes la rodeaban.

La conversación entre Jesús y la mujer junto al pozo revela un método de evangelización que podemos seguir hoy. Comienza con algo pequeño (una pregunta o un comentario común) y poco a poco va pasando a una conversación sobre luchas personales y realidades espirituales. La belleza de este enfoque reside en su sencillez y en la gradual evolución hacia cuestiones más importantes. Jesús no se apresuró ni forzó el tema. En cambio, hizo preguntas, escuchó atentamente y permitió que la mujer se abriera, profundizando la conversación con cada intercambio.

Al principio, Jesús le pidió un trago de agua (algo casual, inofensivo y no amenazante). Una vez que captó su atención, habló de algo personal (su vida, sus relaciones, sus luchas). La mujer, percibiendo la gravedad de la conversación, trató de desviarla hacia un tema menos personal (los debates religiosos públicos). Pero Jesús no dejó que la conversación se desviara. Cuando ella mencionó al Mesías, vio la oportunidad de revelar su identidad, mostrándole que Él era el Mesías que ella había estado esperando.

En esta historia, vemos cómo se desarrollan cinco niveles de conversación, cada uno basado en el anterior. Estas etapas reflejan nuestras propias oportunidades de compartir nuestra fe:

1. De la falta de conversación a la conversación informal: así como Jesús comienza con una pregunta sencilla, todo diálogo comienza con un pequeño riesgo: dar el primer paso para hablar. Ya sea un cumplido, una pregunta o un comentario sobre circunstancias compartidas, iniciar una conversación informal es el primer paso.

2. De lo informal a lo personal: Jesús no se demoró demasiado en una conversación informal. Pasó a un tema más personal, sacando a relucir las luchas de la mujer. De manera similar, a medida que conocemos a otras personas, podemos pasar naturalmente a un territorio más personal, mostrando un interés genuino en sus vidas.

3. De lo personal a lo espiritual: a medida que la conversación se profundiza, también lo hace la oportunidad de hablar sobre la fe. Jesús utilizó la mención que hizo la mujer del Mesías para revelar verdades espirituales. En nuestras conversaciones, nosotros también podemos buscar momentos para compartir nuestra fe.

4. De lo espiritual a lo significativo: Jesús llevó la conversación al meollo del asunto, revelando su identidad como el Mesías. Cuando construimos una relación, escuchamos atentamente y guiamos la conversación con cuidado, también podemos tener la oportunidad de compartir el Evangelio de una manera que resuene profundamente en los demás.

Cada conversación puede cambiar potencialmente una vida, así como la conversación de Jesús junto al pozo cambió la de la mujer samaritana. Si seguimos su ejemplo, podemos pasar de intercambios casuales a conexiones significativas con significado eterno. Todo comienza con el coraje de hablar.

¿Qué conversación vas a iniciar hoy?